Las casitas del horror

Tlajomulco lucha contra desamparo en viviendas abandonadas

SEGURIDAD

ISAAC GUZMÁN

9/28/20232 min read

Tlajomulco enfrenta una crisis de viviendas abandonadas que fomentan la delincuencia y desamparo, mientras autoridades y ciudadanos colaboran en busca de soluciones seguras.

Según el Censo de Población y Vivienda 2020, Tlajomulco se destaca por tener el mayor número de fincas abandonadas en Jalisco, sumando 77,709, siendo el fraccionamiento Los Silos un claro ejemplo de esta problemática, donde la desolación y basura se han apoderado del paisaje.

Los residentes, como Eliza Valdivia, temen por la seguridad de los niños que podrían ser atrapados en estas estructuras abandonadas camino a la escuela, reflejando la angustia de la comunidad.

La municipalidad reconoce que estas viviendas deshabitadas se convierten en guaridas de delincuentes, utilizadas para la venta de drogas, desecho de basura y fosas clandestinas, sin embargo, las acciones preventivas son inexistentes.

Un informe de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y del Infonavit, señala a Ciudad Juárez como la localidad con más casas abandonadas, seguido por Tlajomulco y Zumpango, con 13,953 y 9,842 viviendas deshabitadas respectivamente.

Durante una gira de trabajo por Jalisco, el director general del Infonavit, Carlos Martínez Velázquez, reveló la existencia de 650,000 viviendas abandonadas a nivel nacional, de las cuales se planea regenerar 171,000 en la presente administración mediante el Programa de Regeneración de Vivienda Abandonada.

En Jalisco, se registran 70,000 inmuebles deshabitados, lo que ha llevado al Infonavit y al gobierno municipal de Tlajomulco a firmar un convenio para diagnosticar, rehabilitar y comercializar estas viviendas, buscando revertir esta situación.

Para mitigar la crisis, se han lanzado programas como “Renta tu casa” y “Vivienda protegida” que buscan dar uso a estas estructuras, ya sea rentándolas a grupos vulnerables o asegurando las viviendas para evitar su ocupación por delincuentes.

Aunque se espera que la situación se estabilice en una década, la realidad en fraccionamientos como Villa Fontana Aqua evidencia las repercusiones de la vivienda deshabitada, donde la inseguridad impera y los vecinos deben organizarse para protegerse de la delincuencia.

El gobierno de Tlajomulco, junto con los ciudadanos, inició la segunda etapa del programa Vivienda Protegida, tapizando 300 viviendas abandonadas para salvaguardarlas y convertirlas en espacios seguros, en una iniciativa que busca combatir la inseguridad y mejorar la calidad de vida en el municipio.

Con casi medio millón de pesos destinados para esta etapa del programa, y con la colaboración ciudadana en la ejecución, se espera alcanzar un total de 700 casas aseguradas, contribuyendo a la seguridad y bienestar de la comunidad en Tlajomulco.

A pesar de las acciones, la magnitud del problema persiste con 15,000 casas abandonadas identificadas por el alcalde Salvador Zamora, evidenciando la urgente necesidad de estrategias integrales que aborden la raíz de la problemática de vivienda deshabitada en Tlajomulco.